viernes, 2 de mayo de 2008

Adiós, Abril


Adiós Abril.

El tiempo ha pasado tan rápido que no tuve tiempo, nada de tiempo para saborearte.

Perdóname.

Te vas con tus 30 secretos, para no volver hasta dentro de mucho tiempo y yo he de seguir dejándote atrás, he de convencerme de que te vas, y sin pausa debo caminar hacia delante.

¡Que bello estabas Abril! Y nunca te lo dije. Adornado con flores, lluvias y sol, arcoiris en tus manos y aire frío revolviendo tu camisa. ¿Volverás?

No te sentí, no te observé, no vi tus cambios de capullos a flores, ni las chaquetas por brazos descubiertos, ni tan siquiera reparé en los helados, las terrazas y las tardes de calor.

Adiós, Abril.

Pero, ¿dónde vas?

¿Dónde te esconderás? ¿Cuál es ese lugar tan remoto y escondido que nadie ha podido encontrar jamás?

Son 18 las veces que nos hemos encontrado, y esta última no te besé, ni te abracé, no te hice el amor, no te hice caso. ¿Será porque a medida que envejezco me olvido de ti?

¡Ay! ¡No me hagas caso Abril! ¡Con lo que yo te quiero!

Me quedo con los rastrojos que dejas, en las flores, en los rayos de sol y los pedazos de algodón o nubes cubriendo el cielo.

Adiós Abril...hasta el año que viene.

No hay comentarios: