domingo, 10 de mayo de 2009

Mayos en mayas


- ¿Eso es El Carro?
- Sí, fijate "pam", "pam" "pam" "pam" "pam" - respondiste dibujando las líneas con tu dedo.
Y nos sentimos inmensos en un planeta diminuto.
Una noche de verano se escapó de agosto para vestir nuestros ojos,
y tú y yo nos limitamos a mirar el cielo.
Y a descalzarnos sobre la hierba mojada por la primera tormenta del año.
Primavera de colores, caminamos abrazados,
entre las sombras la vida nocturna se esconde, se recrea en lo oscuro observándonos.
Y juntos olvidamos que allí a lo lejos los jóvenes bailan y beben entre luces,
y me besas la frente, con ese gesto tan típico tuyo, sonrisa cerrada.
Suena tu móvil, pero no lo coges.
- Te dije que hoy toda mi atención es tuya.
Y no puedo aguantarlo y te abrazo.
Me entran ganas de llorar..."qué tontería", pienso.
Pero es que cada vez que nuestros corazones se acercan demasiado, siento la fuerza de los latidos y me asalta el miedo de perderte algún día.
Entonces susurras,
- Tengo mucha suerte.
Y pregunto por qué...
- No sé quién sería hoy en día si no te hubiese conocido.
Y las ganas de llorar me asaltan otra vez.
Después nos caemos ladera abajo, o nos dormimos en un banco perdido, nos peleamos con la alergia, con el sueño, y rendidos nos miramos, sonrientes.
- Te quiero mucho.
- Yo también.
Y soltamos una carcajada al unísono, nos sorprende ser tan tiernos.
Y nos olvidamos del tiempo, soñamos despiertos.


Pasa una ambulancia, nos quedamos parados.
- Cuando tú seas policía y yo médico de ambulancia nos veremos cuando haya algún accidente de tráfico.
- Y cuando te vea diré ¡Un momento por favor! Y dejaremos todo en un segundo plano, para abrazarnos.
Nos reímos, como niños. Pensamos en el futuro, como jóvenes. Nos queremos, como si llevásemos juntos toda la vida.

3 comentarios:

*The Nameless* dijo...

Guau, increíble! Permite que te agregue a mis favoritos! Un saludo y sigue escribiendo así, es una maravilla!

Victor Abarca Ramos dijo...

espero que el tiempo tb se pare xq sino la persona que irá en la ambulancia no llega al hospital...sería una anécdota bastante negra...

por cierto, me gusta que estés así de feliz. un beso, mañana nos vemos!

Anónimo dijo...

Me ha encantado y debo decir que este blog merece mucho la pena para aquellas personas que aman la vida y las bellas experiencias que nos trasmite.

un cordial saludo